Hace
unos días os contaba en esta entrada mis productos de cuidado facial actual en
mi rutina de mañanas. Hoy les toca
el turno a los que utilizo en mi rutina
nocturna y de los cuales sólo mantengo igual el contorno de ojos con
respecto a mi última entrada sobre rutina facial de noche que podéis leer aquí.
Si
comparáis entre ambas entradas veréis que la he simplificado bastante con
respecto a entonces, y es que en verano intento tirar de lo más básico y
sencillo, pues con la subida de temperaturas enseguida me noto la piel
demasiado cargada e incómoda y eso se traduce en un aumento en la producción de
grasa. Mi piel es caprichosa, I know.